VENTANA DE CINE

 

RICHARD JEWELL

2019, BIOPIC, USA, 132 minutos

Director: CLINT EASTWOOD            
Interpretes: PAUL WALTER HAUSER (Richard Jewell), SAM ROCKWELL (Watson Bryan), KATHY BATES (Bobi Jewell), JON HAM (Tom Shaw), OLIVIA WILDE (Kathy Scruggs), NINA ARIANDA (Nadya)

Guion: Clint Eastwood y Billy Ray según el artículo de Marie Brenner. Música: Arturo Sandoval.  Fotografía: Yves Belanger. Producción: Malpaso

CALIFICACIÓN: 9

VALORES: Honradez, verdad, amistad

ARGUMENTO

En 1996, durante los Juegos Olímpicos de Atlanta, se produjo un atentado terrorista en un lugar donde se celebran conciertos públicos. Gracias a la intervención de un obsesivo guarda de seguridad, Richard Jewell, que advirtió la presencia de una mochila sospechosa y ayudó a desalojar el lugar, se pudo evitar la matanza. Pero de ser considerado un héroe, un incompetente agente del FBI y una ambiciosa periodista sin escrúpulos, lo presentan como el principal sospechoso del atentado.


COMENTARIO

Desde hace unos años, las películas de Clint Eastwood se basan en personajes reales, gente anónima que han sido efímeros objetos de atención por parte de la prensa, héroes anónimos con frecuencia vilipendiados tras su éxito inicial. Eso le pasaba al nonagenario protagonista de “Mula”, a los jóvenes norteamericanos que impidieron el atentado del tren rápido que salió de Amsterdam rumbo a París en “15:17: tren a París”, al piloto del avión que aterrizó en el Hudson en “Sully” o al soldado de “El francotirador”. Excepto la del tren, todas ellas han sido auténticas obras sobresalientes. Y eso se puede decir de casi toda su filmografía. Son películas sin aparentes pretensiones de maestría, pero rodadas con una sencillez y una eficacia admirables.  Eso se puede decir también de esta magnífica película.
Es la historia de un tipo irritante, pero bueno; un pesado pero un tipo honrado; un irremediable parlanchín, comilón y tontaina, pero un buen ciudadano, que tiene una fe sin fisuras en las instituciones y los cuerpos de seguridad. A su lado, un abogado con mal genio pero listo, desconfiado y dispuesto a defender al pobre tipo del FBI, de la prensa sensacionalista y de sí mismo.
Tres mujeres ocupan un lugar secundario pero relevante: la madre, una mujer fuerte e íntegra dispuesta a lo que sea para defender el honor de su hijo; una periodista ambiciosa y sin escrúpulos que ve la oportunidad de su vida en esa noticia y la secretaria del abogado,  una mujer dulce, que pone orden en su desordenada vida.
Esos personajes entretejen una historia contada con rigor y un clasicismo admirable. Sin estridencias, sin falsos sentimentalismos y sin dejar que el espectador se aburra. Una maravilla.

  

    

            Jesús Fco. Riaza